El hábitat natural de las jirafas se encuentra en África, sitio en el que pueden ser felices y gozar libremente del espacio que necesitan para vivir, aunque también deben aprender a cuidarse de los depredadores que siempre se mantienen cerca. Un lugar en donde la cadena alimenticia trabaja todos los días sin parar.
Uno de los usos que las jirafas le dan a su cuello es el combate, con este largo miembro de su anatomía se defienden para ganarse un lugar dentro de la manada.
Curiosamente, las jirafas son de los animales que duermen demasiado poco, hasta dos horas por día. Otro datos curiosos es que cuando llegan a la vejez, se alejan de su manada y de las jirafas jóvenes en busca de una ida serena, silenciosa y tranquila.
Las jirafas llegan a vivir hasta 30 años, indudablemente son unos seres magníficos que por su apariencia fascinan al ser humano, especialmente a los niños.
Jhoanna Neri
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